Dos fotógrafas del verano del 97. Amantes de los gatos, y de las cosas bien hechas. El orden en nuestro desorden. El café a cualquier hora siempre está bienvenido. Usamos la fotografía y la dirección de arte para darle voz a las marcas y servicios de nuestro alrededor.
Laia
La creatividad como base de vida. Fotografía como primeros estudios y más tarde complementándose con los de diseño gráfico, que siempre había llamado su atención.
Muy familiar, muy amiga y mucha intensidad en todo lo que hace. Escapando de la rutina con todo lo manual, y participando en todo lo cultural que pasa en su ciudad, que nunca debería acabar.
Ruth
Desde pequeña lo tenía claro: quería ser fotógrafa. Más tarde la dirección de arte en publicidad acabó complementando. No puede trabajar sin música. De vez en cuando desconecta volando haciendo acroyoga, y bailando siempre que puede.